Antes de nada pensemos ¿Qué es el amor? ¿El amor es un sentimiento que no tiene edad porque siempre está naciendo? ¿Son emociones intensas y una gran preocupación por la persona amada? ¿Es cuando al ver a la persona a la que quieres se te pone el pelo de punta y el estomago no deja de dar vueltas? ¿Es cuando si estas un tiempo sin verlo/la necesitas estar a su lado, llamarlo/la, oír su voz…? ¿Es cuando en todo momento tienes ganas de estar abrazándole, dándole besos, acariciándole…?
SI,SI…eso y muchas cosas más es el amor.
Pero ¿cuáles son las características de este sentimiento? Entre ellas podemos mencionar la alegría que nos da el estar cerca de esa otra persona, la sensación de seguridad y protección que se tiene a su lado. También está la necesidad de comunicarte con ella y compartir las experiencias buenas y malas. Esa cercanía nos llena de inspiración y energía para lograr las metas y superar los obstáculos.
Pero ¿Por qué será tan difícil mostrar cómo es nuestro amor? Decimos: “te quiero hasta el infinito», “te quiero más que a mí vida”. Usamos nuestras habilidades físicas para demostrarlo: “te quiero hasta donde mi vista me permite ver” “te quiero tan alto como lo que soy capaz de saltar”, y resulta que al día siguiente todas las expresiones quedan cortas y necesitamos describirlo un poquito más pues el amor es mayor, y no lo entendemos, porque el día anterior nos era imposible amar más y vemos que pasadas las horas ese sentimiento creció.
A todos nos gustaría comprender el amor que a veces nos “enloquece” y sobre todo nos gustaría verlo venir y manifestarlo cuando lo sentimos.
Pues bien, el amor llega a ser comprensible cuando entendemos lo que en su día Christopher Alvarado dijo: “Gracias al amor descubrí una parte de mi en ti, pero Te amo por la parte de ti que tu descubriste en mi».
Por eso el amor es la parte central de nuestras vidas, la que nos reafirma, nos inspira, nos motiva y nos consuela. Es la esencia de todo lo que nos rodea y todo lo que somos.
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