Cada vez hay más personas que tienen pasión por la fotografía y lo manifiestan cuando van de boda.
Aunque nunca se debe restar protagonismo a los profesionales en los que los novios confían para inmortalizar los mejores momentos de su día, amigos y familiares también buscan capturar pequeñas instantáneas.
Pero, pero…veo siempre que las cámaras hacen un contraste enorme con la vestimenta, para ello os ofrezco esta idea que seguro que muchas aprovechareis.
Suplir a un fotógrafo es imposible por la experiencia y por los equipos que disponen.Una de las primeras cosas que descubriréis es que los fotógrafos no llevan una sola cámara a una boda, sino que tienen varias, cada uno con su objetivo montado y cuidan con esmero cada detalle. ¡En definitiva! un fotógrafo prepara el reportaje de boda antes, durante y después de la misma.
No vamos a compararnos con estos excelentes profesionales, pero ir monas con vuestra cámara ¿Por qué no?
Con un poco de imaginación incluso podéis realizarlo en grupo y utilizar el mismo modelo para todos. ¿Qué os parece?