Lo normal es repartir las invitaciones entre 3 y 2 meses antes de la boda, pero no olvidaros que tardan en darlas de 15 días a un mes, así que os recomiendo que paséis por la papelería cuanto antes.
Estaría bien empezar a verlas 5 meses antes de la boda, para curarse en salud y que no te afecte si hay algún retraso en la entrega.
Si tienes algún invitado que vive lejos, lo mejor será que puedas comunicarle vuestra boda lo antes posible y en cuanto tengas confirmadas las fechas ya informárselo aunque todavía no le hayas enviado la invitación ya que ellos necesitan de más tiempo para preparar el viaje y la estancia.
Sin duda algo esencial a la hora de casarse es la repartición de las invitaciones, comúnmente se usa que la pareja vaya de casa en casa dejándolas personalmente a los amigos, compañeros de trabajo y familiares pero eso suele ser un poco aburrido y más en una era donde la tecnología arrasa casi a la velocidad de la luz.
Vamos a ver maneras originales de hacerlo:
– Contratar servicios de artistas especializados que hacen una simpática presentación.
– Por otro lado para anunciarle a la familia la gran noticia se pueden organizar desayunos especiales, algo sencillo para comunicarles el gran momento.
– Alquilar un coche decorado, comprar altavoces y muchas cosas originales para ir de casa en casa entregando las invitaciones. Lo importante es que sea algo inolvidable.
Y, seguro que a partir de aquí se os ocurren más ideas originales y efectivas.