Patricia y Sergio residían en Oviedo pero su boda tenía un destino muy claro León, ciudad que vio nacer a Patricia.
Se acercaron a mi despacho de A Coruña y decidieron que fuese su wedding planner ya que no disponían de tiempo para organizar su boda y deseaban que fuese exquisita.
Contrataron una boda integral con lo cual tenía que elegir el lugar de la celebración, desde el minuto uno intuía que lo tenía claro El Hostal –Parador de San Marcos sería el enclave ideal.
Nunca había organizado nada allí y concerté una cita con la directora para comenzar a planificar la boda: tenía que conocer los espacios, ver las posibilidades para la decoración, buscar alternativas de menú, disponer de un plan”B” por si llovía pues era una ceremonia civil, ver si podría entrar el coche nupcial en la plaza…y así un largo etc, de dudas que necesitaba aclarar para darle forma a la boda.
El excelente equipo de profesionales del Parador me ayudo a organizar y planificar la celebración muy fácilmente. Su amplia experiencia permitió que me quedara tranquila , me deje aconsejar y delegue algunas cosas en sus manos.
Regios salones, amplias habitaciones, y un restaurante que ofrece fundamentalmente una cuidada gastronomía tradicional con toques de autor me aseguraba el éxito de la boda. Los dos días que pasé allí fueron más que suficientes para asegurar que mi decisión había sido correcta.
Todos los detalles que ponía a mi disposición el responsable de eventos, me convencían y cuando se los transmitia a Patricia en el informe se quedaba muy relajada . Desde ese momento disfrutó de lo que tenía que hacer… la compra del vestido de bodas y de preparar el ajuar para el viaje que Sergio organizó a…no os lo puedo decir porque nadie lo sabía, eso sí que fue una sorpresa.
Por su experiencia, distinción y calidad el Parador de San Marcos me enamoro .Y sobre todo tengo que aplaudir que no se opusieron a que trajera proveedores de fuera como en este caso fueron las mantelerías y sillas. Durante el montaje aunque les había entregado un esquema me consultaban constantemente si todo estaba de mi agrado.
Otro día os cuento algo más de esta boda ¿vale?