Cada día es una ocasión especial para la novia mientras organiza su boda, e ir de compras es un momento muy personal.
Si queréis personalizar vuestras compras, os aconsejo elegir un lunes, martes o miércoles por la tarde, no encontrareis mucha gente y podréis reservar las citas en alguna tienda sin agobios.
Este momento debe ser divertido y las compras – acompañadas o no – os servirán para liberar tensiones. Para ello:
– Hacer una lista para evitar comprar por comprar
– Ir bien informadas, así al escuchar otras visiones podréis decidir sin que os influyan
– Solo los buenos profesionales os darán la información que solicitáis sin forzaros a comprar
– Recordar que todas las compras deben de tener una apariencia lo más aproximada al concepto de vuestra boda
– Confiar en que vuestras decisiones son las acertadas, porque nadie mejor que vosotras sabrá lo que queréis para vuestra boda
– Aprovechar las rebajas o tiendas con descuentos para encontrar algún “chollo”
Y si no olvidáis “que menos es más”, volveréis a casa encantadas.