En el universo de una wedding planning, hay mucho, muchísimo de lo que no sabéis, pero en un principio vosotros no pensáis en eso, sino en que tenéis que organizar vuestra boda y por dónde vais a empezar.
En primer lugar, tenemos que haceros una pregunta: ¿Cómo queréis vivirla?. Nos adelantamos y os la respondemos: Podéis planearla como un reto, con miles de millones de listas de cosas que hacer, o disfrutarla con una actitud de fiesta.
Veréis, nadie «necesita» casarse, pero si lo hacéis es para celebrar que os queréis, así que tras esta reflexión canalizar vuestra energía y focalizarla en lo importante.Os damos sólo tres simples razones para que penséis en una wedding planner:
- Una sola persona contactará con la mayoría de las empresas que estarán el día de la boda y vosotros no “cargáis con ese estrés” ¿no será lo mejor?. Ese es uno de los principales trabajos de la wedding planner y a nosotras nos resulta, todo este proceso, muy familiar.
- Al conocer el mercado nupcial muy bien, la wedding planner os pondrá en contacto con grandes proveedores de bodas, que tendrán una especial atención hacia vosotros. De esta forma desaparecerá la vergüenza de sentiros comprometidos en cualquier cita con ellos, pues vuestra wedding planner ya os habrá adelantado todo lo que tenéis que saber y así vuestras preguntas y sus respuestas serán más claras.
- Las empresas participantes en vuestra boda serán elegidas con mucho cuidado para que ofrezcan una gran calidad de servicio/producto, siempre con estilo y adaptándose a vuestras necesidades.
Finalmente recordar que desde que os prometéis hasta el día de la boda el tiempo y la energía, son los bienes más preciados. Las dos cosas más importantes en plena organización de la boda ,y lo primero que se pierde, es el tiempo y la energía. Una wedding planner os devuelve justamente eso, tiempo para poder dedicarlo a otras cosas y no tener que lidiar con proveedores o contratos y energía para destinarla a hacer algo que no todos los novios logran: disfrutar el proceso y no sólo el día de la boda.